Nace en La Guaira, el 28 de
febrero de 1761, José María España, quien conjuntamente con Manuel Gual dirige
el importante movimiento pre-independentista que se conoce con el nombre de “Conspiración de Gual y España”.
España fue un hombre culto, era
asiduo lector de filosofía y política y dominaba los idiomas inglés y francés;
en su casa tenía una amplia biblioteca, con obras en francés, inglés y español.
Al morir su padre, pasa a
regentar junto con sus hermanos una hacienda de cacao llamada "El Carmen", que la
familia España poseía en las inmediaciones de Naiguatá. También ejerció el
comercio.
En 1793 el gobernador y Capitán
General de Venezuela Pedro Carbonell lo nombró Teniente Justicia Mayor de
Macuto.
En los calabozos de las bóvedas
de La Guaira se encontraban, desde finales de 1796, Juan Bautista Picornell,
Manuel Cortés Campomanes, Sebastián Andrés y José Lax, reos de Estado remitidos
presos desde la península por haber intentado establecer allí una república
como la francesa. Gual, España y el grupo de conspiradores que los seguían, se
contactaron con los reos, quienes reafirmaron sus ideas revolucionarias.
José María España, en su posición
de teniente justicia mayor, favoreció la fuga de los revolucionarios españoles,
la noche del 4 de junio de 1797, los ocultó en Macuto y facilitó su huida a las
Antillas el día 26.
Descubierta la conspiración por las autoridades españolas de
Caracas, el 13 de julio de ese mismo año, España y Gual siguieron adelante
celebrando reuniones en un sitio denominado Quita Calzón, río arriba de La
Guaira.
El 14 de julio las autoridades
arrestaron a muchos de los involucrados. Gual y España escapan hacia las
Antillas. José María España fue a la isla de Curazao, de donde pasó luego a las
de Guadalupe, San Bartolomé, Saint Thomas, Sainte Croix, Martinica y finalmente
a la isla de Trinidad.
En 1799 José María España regresó
furtivamente a La Guaira, pero su escondite fue delatado; sometido a juicio, se
le condenó a muerte por sedicioso y conspirador.
El 8 de mayo de 1799 fue
ejecutado en la Plaza Mayor de Caracas. Antes de morir España pronunció las
proféticas palabras: “No pasará mucho
tiempo sin que mis cenizas sean honradas”.
En ese mismo sitio está la
estatua del Libertador Simón Bolívar, de modo que se cumplió su profecía de que
sus cenizas serían honradas.
Hoy 28 de febrero Gobernador
Jorge Luis García Carneiro, el Alcalde José Alejandro Terna y demás autoridades
regionales rinden honores al prócer mártir Jose María España en la
reconstrucción de su casa ubicada en la parroquia la Guaira, con actos
culturales en el que realza su lucha y gesta pre-independentista.
Zona Educativa La Guaira